Muchas veces pasamos por alto que el deporte es una industria. tal como existe el mercado de valores existe el mercado de jugadores. Hay subidas y bajadas en los precios de manera inesperada y mas de una vez estos valores son considerados sobrevalorados. El punto es, que entre todas las industrias que han sido afectadas por la crisis sanitaria actual, está la del deporte. Personalmente como joven que ha crecido en una cultura en la cual el fútbol es el deporte mas visto, escucho en mis diferentes conversaciones con amigos y parientes como todos creen que el fútbol debería volver, que no ven la razón para que no haya fútbol en vivo todas las semanas (y me incluyo aquí).
"Pueden jugar a puerta cerrada y lo transmiten, es así de simple." La industria del deporte tiene esencialmente la misma estructura que cualquier otra. Pero siendo el fútbol un mercado tan dinámico y amplio mundialmente, donde existen equipos grandes y pequeños, no todo se vuelve tan simple. Yo quisiera que fuera así de fácil y solo fuera cosa de tomar un par de medidas de seguridad y transmitir los partidos. De igual manera, los costos detrás de un partido, las ganancias y la división de este capital generado es muy amplio para pensarlo. Las ganancias que genera cada equipo se distribuyen a todo su equipo directivo, no solo los 11 que juegan el partido y fuera de esto, los gastos operacionales que incluyen el mantenimiento de sus sedes, el pago de sus trabajadores y los impuestos que deben pagar hacen que transmitir un partido sea en algunos casos algo mas complejo. Sin mencionar que se pierde parte del espectáculo y la emoción cuando hace falta la afición.
Es impresionante, pero tal como baja el valor de las acciones de las compañías mundiales, también cae el valor de los jugadores. Recientemente el futbolista James Rodriguez pasó de valer 40 millones de euros en el mercado, a los 32 millones (mostrando una caída del 20% en su valor). La caída del valor de los jugadores, es consecuente a la caída de los ingresos que se están recibiendo en los equipos como lo es la ausencia de ingresos por taquilla, venta de camisetas, publicidad entre otras mas. Esta caída, no es proporcional, lo cual dificulta la compra y venta de los jugadores.
De igual manera, todo problema tiene solución. Y para la tranquilidad de aquellos que siguen en gran necesidad de ver fútbol como yo, este fin de semana, con estrictos protocolos de seguridad, y diferentes estrategias ejecutivas para evitar pérdidas, la Bundesliga está de vuelta. ¡Volvió el fútbol! Por que al igual que todas las industrias en el mundo, esta tampoco puede parar de circular. Ahora que ruede el balón.